Te escribo a ti...
A ti que estás sentado, quizás atormentado por algún problema que ocupa gran parte de tu tiempo... A ti cuando miras al infinito esperando escuchar una palabra de aliento... A ti que te sientes solo ante la inmensidad del mundo que te rodea...
Párate unos minutos y sal de ese laberinto diario en el que estás sumergido... Respira en calma, siendo consciente de cada halo de oxígeno que está entrando en tu templo sagrado, y agradece quien eres.
Hasta aquí algo que estás acostumbrado a oír, algo que diariamente puedes ver en cualquier blog de autoayuda, facebook o cualquier otro medio de comunicación... Yo te propongo algo distinto.
Te propongo que seas crítico contigo y dejes de culpar a los demás de todo lo que te pasa, de echar balones fuera y de una vez te responsabilices de tus actos. Te propongo que actúes y definitivamente tu tiempo corra a cargo de ti mismo, no dejando que unos y otros dirijan algo que es sagrado y único: tu vida.
Es maravilloso que nos pasen la mano por la espalda y nos sigan "el juego", haciendo que nuestro NO AVANCE, sea cada vez mayor y crezca hasta el punto de NO RETORNO.
Ya está bien de tanta hipocresía, en la que todos parecen ser maestros y tener la verdad en sus manos. Donde todos dicen cuál es el objetivo y tienen claro el destino, pero pocos o ninguno, me atrevería a decir, te dice el "cómo"...
Párate unos minutos de tu tiempo, y sé honesto contigo... No te puedo asegurar lo que vas a sentir al hacerlo, pues no soy tu, y desconozco la reacción de todo aquel que pueda estar leyendo mis incoherentes palabras, pero si te puedo confirmar mi experiencia:
-" He vivido equivocada la mayor parte de mi vida, siendo un kamikaze directa a una colisión segura: perder una de las cosas que más me importan en esta vida. Y a día de hoy, sabiendo que no hay vuelta atrás, os invito a que no lleguéis a lamentar, sino a trabajar en vosotros, dedicaros cinco minutos diarios a ser coherentes y dejar de responsabilizar a otros de aquello que sólo tú eres causante... Sí, es muy difícil, pero os aseguro que lo es mucho más, saber perdido aquello que tan valioso es para ti.
Un cambio siempre da vértigo, pero una vez tienes controlada la nueva dimensión, haciéndola tuya, todo es más fácil... No se trata de hacer una nueva persona del día a la noche, pero si se trata de empezar y actúar".
Con mis mejores deseos.
Adara.
